Itaca en la mente

"Siempre ten a Itaca en tu mente; llegar allí es tu meta, pero no apresures el viaje. Es mejor que dure mucho, mejor anclar cuando estés viejo. Pleno con la experiencia del viaje..." Constantino Cavafis

jueves, septiembre 28, 2006

El cura pornógrafo

Un sacerdote brasileño tenía una tienda donde alquilaba videos (dotada con una colección de 200 cintas pornográficas), lo que irritó (en el sentido del estado de ánimo, no sean mal pensados) al obispo de la diócesis de Sao Jose do Rio Preto. Esto lo leí el miércoles en un despacho de la agencia EFE.
La historia me trajo a la memoria otros casos de curas que abusaron de niños y que fueron encubiertos por sus superiores en Boston y en otros lugares como México. No pude sino pensar en el doble rasero con que se miden las cosas, más cerca de este mundo terrenal que del trascendente orbe de los valores morales.
Un cura viola a un monaguillo postrado de hinojos durante el Ángelus y se le exime de la ley terrenal, pero otro hombre de dios tiene un videoclub para completar los ingresos de su parroquia y se le reprime por exhibir películas en donde hay intercambio carnal. ¡Vaya cosa!
El hombre de la sotana brasileño dijo en su descargo que la tienda se la había heredado su hermana y además, cumpliendo con la disciplina eclesiástica, la vendió “por un buen dinero”, según sus propias palabras, lo que demuestra que además de ser religioso, es un hombre pragmático.
En fin, se censura por ver algo que en principio no tiene nada de malo (estoy pensando en que las películas XXX eran entre adultos (principalmente heterosexuales, pero no necesariamente) y se esconde y protege a quien sí actúa contra natura, al abusar de menores.
Bueno, esta historia también me hizo acordarme de un chiste: En una iglesia va un brasileño a confesarse y le dice al párroco: “Padre, yo hago el amor a oscuras”, a lo que el religioso, paciente le responde: “No hay mal en ello hijo mío, pero si te inquieta puedes encender la luz”. Y el otro: “No padre, vos no comprende. Yo hago el amor a os curas, a os toreros, a os futbolistas”.

miércoles, septiembre 27, 2006

Mininos sin repelús


En Estados Unidos ya comenzaron a vender gatos hipoalergénicos. Se trata de un tipo de mininos a los que sus propietarios, personas sensibles a los felinos (y con billete), podrán acercarse sin hacer “achú”.
Los gatos cuestan 4 mil dólares y se pueden encargar por internet a la empresa Allerca, que los entregará a principios de 2007. El secreto de esos micifuces antiestornudos radica, según sus vendedores, en que carecen de una proteína que es la responsable de la alergia: la Fel d1.
La publicidad online de la empresa dice que los gatos pesan entre cuatro y ocho kilos y tienen pelajes variopintos, además de que alcanzan la plena madurez en tres años y gozan de una larga expectativa de vida.
Por si fuera poco, los gatitos (que al recibirlos no tienen más de 12 semanas), están certificados por la Food and Drug Administration (FDA) y están equipados con un microchip de identificación.
Lo que no explican es si en la técnica de cruces que emplean para crear a los mininos (Allerca afirma no utilizar métodos de modificación genética) se sacrifica a los gatos que tienen la malhadada proteína. En ese caso estaríamos hablando de procedimientos nazis, de un gatocidio.
Ahora sólo falta que inventen gatos que no coman ni defequen. Y ya puestos a pedir, que no arañen ni maúllen fuera de tiempo. Ya los castran a los machos y les ligan las trompas a las hembras. O sea, micifuces como los de peluche, pero con movimiento y ronroneo naturales.

lunes, septiembre 25, 2006

Amores perrunos

Manolo es un compañero de la piscina que debe andar por los 65 años. Es de una gentileza antigua, casi anacrónica y siempre está de buen humor. A veces su optimismo empalagoso me resultaba un poco molesto. Ahora ya no, porque supe algo que me hizo verlo con otros ojos. Resulta que este hombre perdió, recientemente, en menos de un año a su madre, a su hermana y a su hija de 21 años que murió de un tumor cerebral. Un día oí que lo comentaba como si tal cosa a otro compañero, quien en una conversación informal le preguntaba por su familia. Desde entonces lo veo con respeto. El respeto que se siente por alguien que ha sufrido de verdad. Así aprende uno a dimensionar sus propios problemas, pensé, que nos parecen demasiado grandes, pero que no son nada comparados con los de otros.
El mismo Manolo conversaba el otro día con otro compañero sobre sus mascotas y le contó una anécdota de su perrita, de raza vilstreet, como él jocosamente le llamó, que cuidaba su negocio. Cuando el animal estaba en celo, él dejaba entrar al patio al magnífico mastín de su vecino, un can negro imponente, para que le hiciera el amor a su perrita. Y lo hacían tranquilamente dos o tres veces. Luego la perrita se quedaba feliz a decir de su amo y ladraba de contento. Pero resulta que la perrita se enamoró del mastín. Y así, le dio por escapar e ir a echarse al pie del balcón donde estaba su enamorado, quien a su vez dejó de comer para lanzarle a su amada la comida. Manolo los veía y los dejaba estar. Pero el romance, como un Romeo y Julieta perruno, terminó en tragedia. Porque Manolo se fue de vacaciones y dejó al encargado al cuidado de su mascota; pero como suele suceder, partido el amo, nadie se ocupó de ella y se la llevaron los de la perrera. Cuando Manolo regresó de viaje intentó recuperarla, pero ya era demasiado tarde. La habían sacrificado.
Así, descubro que los animales (al menos los domésticos) no sólo tienen memoria, sino que también se enamoran entre ellos. Esto sí que me sorprendió.

Corrección

Con un poco de retraso, pero como dice el refrán, más vale tarde que nunca. Van Gogh, el gato de Ouka del que hablo en mi post anterior no es danés, sino noruego.

martes, septiembre 05, 2006

Los gatos sí tienen memoria

Cuando viví en Madrid, hace más de 12 años, mi suegra llevaba su gata cuando nos visitaba desde París. Ahí comprobé que sí es verdad que los gatos tienen nueve vidas, pues la Boule (así se llama) se cayó desde la terraza de un décimo piso y apenas tuvo una fractura no muy grave.

Ahora que regresé a París, por primera vez en muchos, muchos años, descubrí otra cosa: los gatos también tienen memoria. No había visto a la Boule desde que nos mudamos de la capital de España al DF, así que calcúlenle. Y al llegar a París, cansado por el viaje, me acosté un rato y me quedé dormido unos minutos cuando me despertó la gata, que ya es anciana, con un maullido. Tiene 17 años, o sea, como noventa y tantos si fuera humana. Hizo lo mismo que hacía en Madrid: maulló para que yo la acariciara. Mis hijos me decían: “sí se acuerda de ti, porque te deja acariciarla y hasta patearla y no te araña (un día salí rápido de la cocina y sin querer la empujé con el pie)”. Y es que la vieja Boule ya no deja que la acaricien desconocidos. Se enoja y rasguña de verdad hasta sacar sangre. Pero hete aquí que a mí sí me dejaba tocarla. El nombre completo de la minina es “Boule de neige” (bola de nieve), porque es completamente blanca y tiene los ojos amarillos.
He de decir que mi belle mère (se oye mejor que suegra) ama a los gatos y a lo largo de su vida ha tenido muchos. Actualmente, además de la Boule, tiene a Van Gogh, un felino danés de suntuoso pelaje y ojos verdes al que le gusta posar para las fotos. Este gato joven, de dos años de edad, es la delicia de mis hijos, pues es cariñoso y juguetón.

Ouca (ma belle mère) escribió incluso un ensayo autobiográfico sobre sus gatos, de muy agradable lectura, por cierto, que ilustró con fotos de la mayor parte de sus mascotas. Lástima que el mercado editorial sea lo que es, porque en realidad merecería ser publicado.
Tengo que agradecerle a Ouca muchas cosas, entre otras la hospitalidad con la que nos acogió a mí y a mi familia en su casa (al igual que Raymond). Pero sobre todo, por ser la mamá de Marie-Hélène, mi amada esposa.

lunes, septiembre 04, 2006

Rey, emperador, tlatoani y dios

Me acabo de enterar de que Andrés Manuel López Obrador piensa reclamar la corona de España. Además, se autoproclamará emperador de la República juarista de América, lo que le causará severos roces con Hugo Chávez, que no acepta otra república para América que la bolivariana, ni a otro emperador que no sea él mismo. Esto podría afectar a la financiación del peje, que en adelante será llamado ya no “peje”, sino “tlatoani”. Sobre lo de la corona de España, alega que los borbones son herederos espurios de los austria, y que de borbones, bobones, mormones y mam… ya estuvo bueno. Así que reclama para sí el trono, no de los portátiles esos que usan en el plantón, sino el de verdad, el fetén, para posar en él su regio derrier (consúltese el Larousse Francés-Español). Y ya puestos, también quiere que modifiquen la Biblia, porque le robaron el rol de Jehová. Amén. Acá les dejo una foto tomada de internet donde se muestran los avances de los reales sitios en donde se instalará la corte imperial en sesión permanente.