Ernest Hemigway escribía por 1920 que París era una fiesta. Hoy, casi un siglo más tarde, los franceses se preguntan si su capital se está convirtiendo en un museo. No había estado en la Ciudad Luz en 20 años, luego de haber vivido en ella durante año y medio, y la encontré idéntica a sí misma, pero diferente.
En las casas parisinas existe un lugar llamado “le cabinet”, que en contra de lo que pudiera parecer, es el lugar ideal para la meditación metafísica. Ahí me encontré un ejemplar de la revista ‘Le Nouvelle Observateur’ que en la última semana de junio dedicó su portada a este trascendental tema: “¿París se está convirtiendo en un museo?”. Había discrepancias de opiniones entre la pléyade de artistas, arquitectos, empresarios, galeristas, directores de museo, funcionarios públicos, etcétera, entrevistados por el semanario.
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y segirá siendo el mundo al revés)